En todas las empresas existen múltiples fuentes de métricas dispersas en la organización: sistemas de analítica web (como Google Analytics), herramientas de medición de redes sociales, plataformas de gestión de la inversión publicitaria, sistemas de stock internos, asistencia a eventos, etc.
Esta dispersión hace que, muchas veces, cada sistema se evalúe como silos de información independientes, lo que dificulta una visión global que ayude a ver la contribución de cada canal en la consecución de los objetivos marcados.